El proceso de desarrollo de productos en 7 etapas

El proceso de desarrollo de productos en 7 etapas es uno de los modelos más utilizados en la industria para crear productos de alta calidad y que tengan éxito en el mercado. Este proceso no solo asegura que el producto final cumpla con las necesidades y expectativas de los clientes, sino que también permite una producción y comercialización eficientes. A continuación, explicaremos en detalle cada una de las 5 etapas del proceso.

¿Qué es el proceso de desarrollo de productos?

El proceso de desarrollo de productos es un enfoque sistemático que las empresas emplean para concebir, diseñar y lanzar nuevos productos al mercado. Surge de la necesidad de gestionar eficientemente la complejidad inherente al ciclo de vida de un producto, desde su concepción hasta su introducción en el mercado y su aceptación por el público al que va destinado.

Este modelo tiene como objetivo minimizar los riesgos que implica el desarrollo de un producto y optimizar el uso de recursos durante todas las fases que abarca. Estos no solo se refieren a los económicos, sino también al tiempo.

Sin embargo, a pesar del riesgo que pueda suponer para una marca, el mercado está en constante cambio. También lo están las necesidades y las expectativas de los consumidores, que cada cierto tiempo, van buscando novedades que puedan satisfacer sus múltiples y variables deseos.

Por otra parte, la elevada competencia, que se ha incrementado exponencialmente al desaparecer las barreras geográficas, así como la evolución de las nuevas tecnologías fuerza a las empresas a ser más ágiles y proactivas. De esta manera, no solo pueden responder con mayor rapidez ante dichos cambios, sino que pueden adelantarse a los mismos.

Para ello, es necesario realizar una generación de ideas que permita identificar cuáles son las necesidades no satisfechas o qué nichos disponibles hay en el mercado para penetrar. Esta es tan solo una de las etapas del proceso de desarrollo de productos, del que hablaremos en detalle a continuación.

Las etapas del proceso de desarrollo de productos

Etapa 1: Identificación de la necesidad

La primera etapa del proceso de desarrollo de productos es la identificación de la necesidad. En esta etapa, se busca comprender las necesidades del mercado y de los clientes, con el objetivo de identificar oportunidades de negocio. Para ello, es necesario hacer una evaluación de la competencia y establecer cuáles son los objetivos generales que se persiguen y las metas con respecto al producto.

Es importante en esta etapa establecer un equipo multidisciplinar que incluya expertos en diseño, ingeniería, producción, marketing y ventas. De esta manera, hay una garantía de que se estarán contemplando todas las visiones posibles. Este equipo debe estar en constante comunicación para asegurar que el producto se desarrolle de manera efectiva y cumpla con las necesidades del mercado. Así es como comienza Mercedes Benz.

El motivo por el que el proceso comienza identificando una necesidad es que, sencillamente, no es posible vender un producto si no existen clientes que lo necesiten o que puedan interesarse en él. La única alternativa es invertir para crear esa necesidad. Sin embargo, supondría una inversión económica y de esfuerzo humano mucho mayor.

Etapa 2: Investigación y análisis de datos

Esta etapa aplica, sobre todo, a aquellos productos que se caracterizan por ser innovadores. Una vez que se tiene una idea sobre algo que puede funcionar, no se pasa automáticamente a su fabricación. Antes, es necesario investigar y obtener datos reales y fiables que aseguren su viabilidad. 

En numerosas ocasiones, se tiende a pensar que la innovación equivale de forma directa y unánime al éxito entre los consumidores. Sin embargo, el interés por parte de estos depende de diferentes variables y el atractivo de una propuesta no es suficiente para garantizar su éxito. En los negocios, funciona justamente al revés. Primero se identifica lo que es de interés para un público objetivo y después se desarrolla algo innovador para satisfacer esa necesidad o preferencia.

Los estudios de mercado también permiten analizar qué otras propuestas similares hay, cuál es la competencia y su poder, con qué elementos se cuenta ya o los costes de obtener las materias primas necesarias. Estas no tienen que ser necesariamente algo tangible, sino que también se incluye, por ejemplo, el desarrollo de un software.

Etapa 3: Diseño conceptual

La tercera etapa del proceso de desarrollo de productos es el diseño conceptual. En este momento, se construye una idea inicial del producto y se define su función, acorde con la investigación previa. También se determinarán sus características principales, diseño y materiales a utilizar. También se tienen en cuenta las limitaciones técnicas y económicas. El concepto debe responder a las necesidades identificadas y, aunque esta es una de las fases más creativas, es vital no separarse de lo averiguado en la etapa anterior.

De hecho, se deben realizar varias pruebas y evaluaciones en esta etapa para asegurar que el diseño del producto sea efectivo y cumpla con las expectativas del mercado y de los clientes. El equipo de desarrollo debe estar en constante comunicación y retroalimentación para lograr un diseño efectivo y de alta calidad.

Etapa 4: Diseño detallado

La cuarta etapa del proceso de desarrollo de productos es el diseño detallado. En esta fase, se especifican las dimensiones exactas, la geometría, los materiales y los procesos de fabricación. Se definen las especificaciones técnicas y los requisitos de calidad.

También aquí se llevan a cabo varias pruebas y evaluaciones que aseguren que el diseño del producto sea efectivo y cumpla con los requisitos de calidad. Se deben tener en cuenta los costes de producción y la eficiencia en la fabricación para que el producto final sea rentable. En otras palabras, ya no se trata de ideas en el aire o valoraciones, sino que se concretan los últimos detalles para pasar a la fabricación.

Etapa 5: Desarrollo y fabricación

La quinta etapa del proceso de desarrollo de productos es el desarrollo y la fabricación. En esta etapa, se produce el prototipo del producto y se realizan pruebas y tests para corregir posibles deficiencias y optimizar el diseño. Es decir, que aquí se trata del prueba y error. En la parte práctica es cuando se puede comprobar a ciencia cierta si algo de la planificación previa no es realmente viable por algún motivo.

Las causas pueden ser múltiples. Alguna pieza no encaja bien o no aporta nada, el aspecto final no es tan atractivo o una interfaz presenta problemas básicos de navegación. Es importante revisar todo desde el punto de vista del usuario final.

Después, se implementan los controles de calidad necesarios. Por supuesto, el tiempo que pasa entre el desarrollo y la fabricación no puede fijarse de antemano. Se recomienda que el equipo de desarrollo trabaje en estrecha colaboración con el equipo de producción para asegurar que el producto se fabrique de manera efectiva y eficiente. También se deben tener en cuenta los costes de producción y la eficiencia en la fabricación para que el producto final sea rentable.

Etapa 6: Lanzamiento del producto

La sexta etapa del proceso de desarrollo de productos es el lanzamiento de estos, que va de la mano de la producción a gran escala. Se fija el proceso de fabricación, que se adaptará a los resultados que tenga en el mercado, y se gestiona la cadena de suministro.

Junto a la parte mecánica, se incluye la estrategia de marketing. Estas abarcan desde las campañas de promoción y visibilidad hasta el establecimiento de los canales de distribución. En esta etapa, es fundamental contar con un equipo de marketing y ventas efectivo que promocione y posicione el producto en el mercado. Se deben establecer estrategias de publicidad para aumentar la visibilidad del producto y generar interés en los clientes potenciales. Si el público objetivo no sabe de la existencia de aquel, no se generará la demanda esperada.

Etapa 7: Seguimiento de los resultados

La séptima etapa del proceso de desarrollo de productos consiste en hacer un seguimiento de los resultados prolongado en el tiempo. Después del lanzamiento, las ventas pueden crecer gradualmente, estancarse o descender. En cualquiera de los tres casos, se debe conocer lo que funciona y lo que no, y cuando sea necesario, introducir cambios o mejoras que permitan que los resultados se vayan acercando a los objetivos previamente establecidos. Es crucial efectuar un seguimiento constante del mismo para asegurar su éxito en el mercado.

Además, se deben recolectar y analizar datos sobre las ventas, los comentarios y opiniones de los clientes, las tendencias del mercado y la competencia. Esto permitirá identificar oportunidades de mejora y actualizar el producto de acuerdo con las necesidades del mercado. Esto en cuanto al proceso de desarrollo en siete etapas.

Otros procesos de desarrollo de productos alternativos

Junto a las etapas que hemos mencionado, existen otros procesos alternativos. Por ejemplo, la Metodología Working Backwards de Amazon. Es un enfoque de desarrollo y planificación centrado en el cliente. A diferencia de los métodos tradicionales que comienzan con la definición de requisitos y especificaciones, tal y como hemos indicado, esta metodología se inicia por la parte final.

En lugar de comenzar con la pregunta “¿Cómo construimos esto?”, lo que Amazon se pregunta es “¿Cómo comunicamos esto a los clientes?”. La primera fase implica redactar un comunicado de prensa ficticio que describe el producto y su impacto en los clientes. A continuación, se elabora un conjunto de preguntas frecuentes, que anticipa las inquietudes y las posibles consultas que podrían surgir.

Este proceso obliga a los equipos a visualizar y comprender claramente el producto desde la perspectiva del cliente, antes de sumergirse en la implementación técnica. Esta fase también se lleva a cabo durante las etapas tradicionales, pero ya se parte de una idea real de la fabricación del producto.

Este enfoque fomenta la innovación centrada en el cliente al asegurar que cada paso del desarrollo del producto esté alineado con sus expectativas. La metodología Working Backwards ha sido fundamental para el éxito de Amazon, puesto que prioriza la experiencia del usuario desde las etapas iniciales del desarrollo.

En resumen, el proceso de desarrollo de productos en siete etapas es una metodología efectiva para crear productos con cierta garantía de éxito en el mercado. Desde la identificación de la necesidad hasta el lanzamiento y seguimiento, cada etapa es fundamental para lograr un producto de alta calidad que cumpla con las necesidades y expectativas de los clientes. Es vital contar con un equipo multidisciplinar y en constante comunicación para lograr un diseño efectivo y de alta calidad. Y también hay que tener en cuenta los costes de producción y la eficiencia en la fabricación para que el producto final sea rentable. Llevar un seguimiento constante del producto en el mercado y analizar su desempeño permitirá identificar oportunidades de mejora y actualizar el producto según las necesidades del mercado. Mediante este proceso, se pueden crear productos de éxito y de alta calidad que satisfagan a los clientes y generen beneficios para la empresa.